El pasado viernes, 23 de octubre de 2012, fueron rescatadas en el aeropuerto de Barajas varias crías de mapache y una tortuga en malas condiciones. Los presuntos cabecillas de esta red de tráfico de animales se hicieron con ellas en la isla de Cozumel, en México. Se encuentran detenidos por las autoridades policiales y prestarán declaración en los próximos días.

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

 

 

 

Todavía se desconoce cuál era el destino de estas tres crías, dos mapaches de Cozumel y una tortuga caguama, que forman parte de la fauna en peligro de extinción de esta pequeña isla mexicana. Portavoces de asociaciones animalistas que ya han denunciado el caso nos dan pistas de las posibles motivaciones tras su rapto. Dicen que los traficantes podrían pretender venderlas a criaderos ilegales de animales para seguir produciendo crías, directamente como mascotas exóticas o a circos ambulantes de animales para que formen parte de un nuevo espectáculo.

 

Los animales llegaron deshidratados y magullados. Habían pasado más de doce horas escondidos en pequeñas jaulas dentro de una maleta en el vuelo de México a España. Uno de los mapaches presenta lesiones de gravedad y ha sido trasladado a un centro de recuperación, donde será atendido durante las próximas semanas. Se desconoce qué ha sido de sus familias en su lugar de origen y si las crías algún día podrán volver a vivir en libertad en su tierra.